martes, 7 de septiembre de 2010

MENSAJE DE NEYER CERNA

Estoy con la garganta reventada, los pies destrozados e inmensamente feliz. Es tanta la felicidad que no puedo ser racional y necesito serlo ahora que regreso al trabajo…
Cuando dejas de ser racional te descubres y quedas tan indefenso que puedes perder lo que tu llamas vida. Hoy, a pesar de ese riesgo, quiero hablar con el corazón.
En estos dos días he recibido mucho amor, generosidad y fraternidad que me parece increíble lo que me viene sucediendo con ese desprendimiento tan real y natural de energía. Han sido dos días donde todos, absolutamente todos hemos tenido la oportunidad de sentirlo y transmitirlo a través de abrazos interminables, sonrisas permanentes, miradas francas y lagrimas de felicidad. Esas lagrimas que solo brotan en aquellos valientes que hablan con el corazón, .
Ustedes mis amigos de siempre me han mostrado que la gratitud no es una palabra cualquiera, es energía que mejora tu vida y que te prepara para ganarle las batallas pendientes a la adversidad.
He recibido tanto amor y buenas intensiones que no le tengo miedo al mañana, que mi futuro esta lleno de extraordinarias oportunidades y que puedo poner el pecho sin temor al fracaso. Parece tonto lo que digo, en especial para un hombre de mi edad. Sin embargo todos los parabienes recibidos refuerzan mi esperanza de que así será.
Gracias a los amigos por volverlos a ver y saber que nuestra amistad siempre estuvo allí, esperando que la volviéramos a encender.
Gracias a los soñadores del reencuentro por envolvernos con su entusiasmo, motivación y trabajo. Gracias por permitirme ser parte de estos dos días grandiosos.
A los amigos que no pudieron venir por diversas razones, no se preocupen que estuvieron presentes en nuestros corazones.
Gracias muchachos por esta segunda oportunidad y a todos les deseo lo mejor que la vida les pueda dar y que Dios con su infinita bondad acompañe sus pasos.…
Fueron los dos mejores días de mi vida adulta.
Un abrazo

Neyer